Las empresas han reducido sus inversiones en todo excepto en Internet.
De esta manera, podemos asegurar que sólo este medio ha conseguido mantener unos números positivos en cuanto a la inversión, pese a que también ha visto reducido su enorme ritmo de crecimiento.
Las nuevas estrategias del marketing digital, pero sobre todo, el reducido coste de la inversión en campañas en la Red, son los principales culpables de que Internet sea el único capaz de resistir a la crisis.
De entre los medios convencionales, la prensa es la que ha salido peor parada y registra un descenso mayor.
Internet es por lo tanto el único claro en un mercado en el que todo se ve muy negro.
Las empresas conocen de las posibilidades que ofrece el medio a nivel creativo, en estrategias de marketing digital, a nivel de SEO (optimización en buscadores), etc.
Por eso, lo más probable es que siga siendo la apuesta ganadora para todos ellos y poco a poco, aumente su presencia en el citado pastel de la publicidad.